Por: Manuel Tovar Seña
La vereda Bamba está ubicada a 17
km de la cabecera municipal al norte de El Bagre, es atravesada por la
carretera que comunica al corregimiento de Puerto Claver con el casco urbano de
El Bagre, es habitada por familias provenientes de los departamentos de Córdoba
y Bolívar y con una gran influencia indígena Senú.
Estas familias poblaron el valle
generado por la Quebrada Bamba y se establecieron a vivir de la agricultura y
la ganadería de sustento; están conformados en Junta de Acción Comunal elegida
por voto popular, existe una Iglesia Cristiana la cual reúne a muchos
feligreses no solo los de la vereda sino también de las veredas vecinas; tienen
una cancha donde practican el único deporte, el fútbol.
Cuenta con una escuela que ofrece
los grados de preescolar a quinto y también funciona el bachillerato rural por
prestación de servicio.
Antes de llegar a Bamba uno puede
apreciar el paisaje lleno de montañas cubiertas de rastrojos con pequeños
parches de color café (tumbas realizadas por las personas para establecer sus
cultivos de pancoger) la carretera obliga a dar varias curvas y cuando de
repente se topa uno con el caserío cuyas casas en su mayoría están construidas
en madera burda y techos de zinc
Aunque Bamba no fue epicentro del
conflicto armado en la década de los 90 y 2000, si se registraron asesinatos y
desapariciones, acciones que aun genera miedo en algunas personas a la hora de
recordar lo sucedido.
Bamba inició el Piloto de Paz en
febrero de 2015 y finaliza hoy 28 de Julio de 2015, durante este tiempo
desarrollaron seis encuentros en donde
los participantes recorrieron las realidades de la Memoria de la vereda,
fortalecieron los procesos democráticos y participativos como pilares para
garantizar la calidad de vida, imaginaron como sería el post- conflicto en
temas como la reintegración, su convivencia entre ellos y entre sus veredas
vecinas; tuvieron tiempo de pensar y revivir aquellas costumbres que se han ido
perdiendo, como la Celebración del Día Campesino, como los juegos " La
Vara de Premios" y los partidos de fútbol, donde la cooperación es
necesaria entre amigos, vecinos y familiares para finalmente obtener buenos. En
más de una ocasión pensaron que no eran capaces, quizás, de sacar adelante un
proyecto comunitario, pero lo hicieron, estructuraron desde la programación
hasta la ejecución; lo que significa que a las comunidades rurales más que
darles y hacerle los proyectos; es más
bien facilitarle los medios para que ellos por iniciativa propia formulen,
gestionen y ejecuten lo que ellos ven conveniente para vivir bien y vivir feliz
.
LA RURALIDAD DE CARA AL POST-
CONFLICTO
Con los aprendizajes generados a
partir del Piloto de Paz quedan varios
retos no solo para las comunidades participantes directamente del piloto, sino
también, de la ruralidad en pleno.
Se requiere hacer mucho énfasis
en los procesos formativos a las comunidades para que se concienticen de hacer
uso adecuado de los canales democráticos y vean
la participación como el camino
para incidir en las procesos políticos para que los territorios rurales sean
tenidos en cuenta en los presupuestos y las grandes agendas públicas.
Se debe potencias los procesos
educativos sobre todo el bachillerato y garantizar la accesibilidad de los
jóvenes a la educación superior.
Es urgente la inclusión del
fomento a la cultura y las tradiciones Rurales, entendido esto no solo como el
fútbol sino también diferentes juegos los cuales no se tienen en cuenta en las
agendas públicas porque tal vez no genera réditos politiqueros a los de turno.
Hay una gran tendencia por el
repoblamiento y la conservación del
patrimonio natural en las familias rurales, la cual se sugiere debe ser
aprovechada para impulsar economías mas amigables con los bosques y la gente.
Finalmente existe una urgencia la
cual no espera muchas contemplaciones; la del empleo, dado que si no se
garantizan los mínimos decentes de vida a las familias rurales, el desespero y
la falta de oportunidades, sin duda terminaran por arrebatar los pocos valores
que se han logrado cultivar al interior de las personas y las familias a lo largo y ancho de este territorio
singular. La Serranía de San Lucas.
Que bueno lo que esta pasando en el Bagre. Espero ser parte de esto cuando regrese a Colombia.
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